Stand by me.

Las personas tenemos la gran suerte de vivir en sociedad, poder relacionarnos unos con otros, tenernos sentimientos, compartir gestos, miradas, emociones, anécdotas, conocernos... Y en esa sociedad, crear vínculos.
Todos nacemos gracias a 2 progenitores y, aunque no todos los conocemos, una mayoría de nosotros, no solo tenemos la suerte de que nos den la vida, sino que a lo largo de la vida, nos dan una educación, nos aportan unos valores, nos enseñan y sobretodo, nos presentan al mundo. Un mundo que, ese sí, poco a poco iremos descubriendo.
Vamos creciendo, conociendo a más gente a parte de nuestra familia. Primero un colegio, después un instituto... Vamos madurando, conociendo a gente. Gente que nos decepcionará, gente con la que pasaremos tiempo limitado, gente que estará con nosotros siempre, gente que nos hará daño, gente que nos aportarán muchos conocimientos, gente que nos querrá, gente que nos apoyará... Y de todo eso, nos iremos dando cuenta en el transcurso de la vida.
Llega un momento, en el que te conviertes en adulto. No es que hayas dejado de aprender, ya que nunca dejas de aprender. Pero es un punto, en el que la vida te ha dado muchos conocimientos, los necesarios para llegar a un alto grado de madurez. No es fácil llegar a ese punto, pues hay mucha gente considera adulta y no tiene ni un dedo de madurez. Y es en ese punto, cuando empiezas a vivir la vida de una manera más intensa.
Dicen que a partir de los 20 años, el tiempo pasa sin a penas darnos cuenta. Y yo me planteo si posiblemente sean 20 años los necesarios para realmente conocerte. ¡Eso es lo más importante! Creo que en esa edad adulta, lo más importante es que uno se conozca a sí mismo y conociéndose a sí mismo, podrá hacer que los demás lo conozcan.
Es por eso la importancia, según cómo seamos, tendremos un círculo de amistades u otro. Pondremos en muestra los gustos, las aficiones, los carácteres y con unas personas congeniaremos más que con otras. Las personas con las que congeniemos serán las que formen parte de nuestro círculo en la vida. Esas personas, si consiguen llegar a quererte y valorarte, estarán a tu lado en todo momento, aunque no grites su nombre para pedir auxilio, sabrás que están ahí.
Serán personas que se desvivirán por tu bien estar, que intentarán quitarse algo suyo para dártelo a ti, que pensarán en ti cuando lleves mucho tiempo sin saber de ellas, que queden contigo un día cualquiera para reíros juntas, que se acuerden de fechas señaladas, que te den su positividad, que te sepan escuchar, que te demuestren su cariño mediante gestos y no solo palabras, que aunque a veces necesarias, no son suficientes, que estén a tu lado en momentos difíciles, que te ayuden a levantar después de una caída, que cuenten contigo, que te animen en momentos difíciles. ¡Esas personas serán las que valgan la pena! ¡Esas personas serán las que realmente, pasarán contigo la vida! ¡Esas personas serán las que siempre, te querrán y querrán a todo lo que tú quieras! ¡Esas personas serán las que te respetarán, las que no tendrán envidia, las que no actúen por rabia, las que te den todo su apoyo desmesuradamente sin que tú lo pidas!
Serán personas que sabrán que siempre hay algo de verdad detrás de cada broma, que siempre hay necesidad detrás de un "Déjame sola", que siempre hay algo de emoción detrás de un "No me importa", algo de dolor detrás de un "Estoy bien" y algunas palabras detrás de silencios. Serán personas que sepan hacerse notar cuando tú te sientas sola, que aparezcan para guiarte cuando no sepas dónde ir y que te demuestren su amor cuando nadie más lo haga.
Imposible es llevarse bien con el mundo entero. Pero siempre habrán personas que estarán a nuestro lado, queriéndonos, aconsejándonos y apoyándonos en nuestras decisiones y actos. Y ese círculo será el completo, el que nos haga sentir llenos.