viernes, 9 de septiembre de 2011

MAMÁ.

Fue ella quien me formó en su interior durante 9 meses, dándome todo lo que necesitaba. Fue ella quien me dió la vida, usando todo su valor, corage y fuerza. Fue ella quien me miró a los ojos y me dio a entender que me haría feliz en resto de mis días.
Ella es mi madre, la mujer más importante de mi vida.

Hoy, es a ella a la que, una vez más, le doy las gracias, a la que quiero transmitir todo mi cariño y amor y hacerlo público, a la que quiero demostrar que pase lo que pase y sienta lo que sienta, ella será quien más importe.
Desde el día que nací, ha sido ella mi máximo apoyo. Cuando era pequeña, sólo una niña, ella era, para mí, la perfección personificada. Era mi ejemplo a seguir, mi icono, mi fuente de amor. Y ahora, que no soy tan pequeña, a pesar de saber que la perfección no existe, no he cambiado mi visión sobre ella. Es para mi, y hoy me vuelvo a dar cuenta de ello, la única persona sobre la tierra, que nunca, nunca, NUNCA, dejará de quererme; que nunca, nunca, NUNCA, me hará daño, y aunque a veces crea que sí, con el tiempo me daré cuenta de que fue por mi bien. Es la única que nunca hará nada que no sea beneficioso para mí, que nunca dirá nada para fastidiarme, que nunca me dará la espalda, que nunca dará prioridad a otras cosas antes que a mí, que me hará sentir especial, que lo dejará todo por mí, que me sacará una sonrisa cuando esté apagada, que me preguntará "¿Qué te pasa?" cuando sepa que estoy mal, que me dará un abrazo siempre que lo necesite, que me ofrecerá su ayuda cuando yo aún no la haya pedido, que me dará los mejores consejos.
Es mi madre la que mejor me conoce. Es mi madre la que a pesar de todas las peleas que tengo, sé que me dará la máxima confianza. Es mi madre la que me dará todo su apoyo. Es mi madre la que me intentará entender, aunque a veces no lo consiga. Es mi madre la que siempre me consentirá por muchos años que pasen. Es mi madre la que se da cuenta de cuando necesito mas su presencia, cariño, ánimo.
Es mi madre con la que siempre me peleo, pero es a ella a la que siempre recurriré cuando no me encuentre bien. Posiblemente es ella la persona a la que más me parezca y por eso chocamos tanto.
Nadie es perfecto y cuando tenemos hijos, nadie nos enseña a ser ni mamá ni papá, es algo que se aprende. Y yo, desde aquí, le digo a mi madre que GRACIAS POR SER LA MEJOR, pues para mí lo es. Me ha enseñado mucho, prácticamente todo; me ha dado muchos valores, los mejores; me ha ayudado siempre, no dejándome llegar a caer; me ha mimado, dándome su amor; me ha dado lo mejor, creándome como persona. No sabría ser madre antes de tenerme, pero ha conseguido ser una madre ejemplar.

Mamá, gracias; gracias por hacerme tan feliz cada día. Sabes que hoy estaba triste y por eso mismo has hecho que pudiese despejarme. Sabes que necesito sentirme especial, y sé que tú, vas a intentar que así me sienta. Sabes que ahora estoy algo perdida, que dudo sobre algunas de mis decisiones o pensamientos, y sé que vas a poder orientarme. Gracias por escucharme mamá, gracias por dejar que me desahogue, gracias por esas palabras de ánimo que siempre están ahí, gracias por secar mis lágrimas y también por hacerlas aparecer cuando por mí sola no puedo sacarlas, gracias por un simple abrazo, gracias por una sencilla anécdota. Gracias por formar parte de mi pasado, mi presente, mi futuro, de mi vida. Gracias por los consejos, por intentar ser objetiva a la hora de guiarme. Gracias por compartir tu tiempo con el mío.
Perdón si alguna vez te fallé, si no pudiste sentirte orgullosa con algunos de mis gestos, si te decepcioné. Perdón si alguna vez te he hecho daño con mis palabras. Perdón si muchas veces no te he dedicado el tiempo que merecías, no he estado contigo o no te he dado mi apoyo. Perdón por todo eso, por no haberte respondido como tú haces.
Eres lo mejor que tengo en la vida y me has dado cosas esenciales en mi vida.
Sé que siempre estarás a mi lado, que seguiremos compartiendo miles de momentos juntas, que con tus brazos, crearás una protección sobre todo mi ser, que seguirás aportándome miles de enseñanzas en mi, que seguiremos teniendo esa conexión, que seguiremos riéndonos juntas. Siempre serás mi madre, la que ocupe un gran y especial lugar en mi corazón. Serás una persona muy importante para mí, pues tú eres la que me ha dado esta seguridad que tengo yo en mí misma.
Y como Chayo le hizo a su madre, a mí sólo me queda decirte: "Lady Isa, abrázame fuerte. Lady Isa, y cuéntame un cuento. Lady Isa, un beso otra vez, Lady Isa. Lady Isa, abrázame fuerte. Lady Isa, y hazme dormir. Lady Isa, un beso otra vez, Lady Isa..."

Nunca me dejes, mamá. Te quiero.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Stand by me.



Las personas tenemos la gran suerte de vivir en sociedad, poder relacionarnos unos con otros, tenernos sentimientos, compartir gestos, miradas, emociones, anécdotas, conocernos... Y en esa sociedad, crear vínculos.
Todos nacemos gracias a 2 progenitores y, aunque no todos los conocemos, una mayoría de nosotros, no solo tenemos la suerte de que nos den la vida, sino que a lo largo de la vida, nos dan una educación, nos aportan unos valores, nos enseñan y sobretodo, nos presentan al mundo. Un mundo que, ese sí, poco a poco iremos descubriendo.
Vamos creciendo, conociendo a más gente a parte de nuestra familia. Primero un colegio, después un instituto... Vamos madurando, conociendo a gente. Gente que nos decepcionará, gente con la que pasaremos tiempo limitado, gente que estará con nosotros siempre, gente que nos hará daño, gente que nos aportarán muchos conocimientos, gente que nos querrá, gente que nos apoyará... Y de todo eso, nos iremos dando cuenta en el transcurso de la vida.
Llega un momento, en el que te conviertes en adulto. No es que hayas dejado de aprender, ya que nunca dejas de aprender. Pero es un punto, en el que la vida te ha dado muchos conocimientos, los necesarios para llegar a un alto grado de madurez. No es fácil llegar a ese punto, pues hay mucha gente considera adulta y no tiene ni un dedo de madurez. Y es en ese punto, cuando empiezas a vivir la vida de una manera más intensa.
Dicen que a partir de los 20 años, el tiempo pasa sin a penas darnos cuenta. Y yo me planteo si posiblemente sean 20 años los necesarios para realmente conocerte. ¡Eso es lo más importante! Creo que en esa edad adulta, lo más importante es que uno se conozca a sí mismo y conociéndose a sí mismo, podrá hacer que los demás lo conozcan.
Es por eso la importancia, según cómo seamos, tendremos un círculo de amistades u otro. Pondremos en muestra los gustos, las aficiones, los carácteres y con unas personas congeniaremos más que con otras. Las personas con las que congeniemos serán las que formen parte de nuestro círculo en la vida. Esas personas, si consiguen llegar a quererte y valorarte, estarán a tu lado en todo momento, aunque no grites su nombre para pedir auxilio, sabrás que están ahí.
Serán personas que se desvivirán por tu bien estar, que intentarán quitarse algo suyo para dártelo a ti, que pensarán en ti cuando lleves mucho tiempo sin saber de ellas, que queden contigo un día cualquiera para reíros juntas, que se acuerden de fechas señaladas, que te den su positividad, que te sepan escuchar, que te demuestren su cariño mediante gestos y no solo palabras, que aunque a veces necesarias, no son suficientes, que estén a tu lado en momentos difíciles, que te ayuden a levantar después de una caída, que cuenten contigo, que te animen en momentos difíciles. ¡Esas personas serán las que valgan la pena! ¡Esas personas serán las que realmente, pasarán contigo la vida! ¡Esas personas serán las que siempre, te querrán y querrán a todo lo que tú quieras! ¡Esas personas serán las que te respetarán, las que no tendrán envidia, las que no actúen por rabia, las que te den todo su apoyo desmesuradamente sin que tú lo pidas!
Serán personas que sabrán que siempre hay algo de verdad detrás de cada broma, que siempre hay necesidad detrás de un "Déjame sola", que siempre hay algo de emoción detrás de un "No me importa", algo de dolor detrás de un "Estoy bien" y algunas palabras detrás de silencios. Serán personas que sepan hacerse notar cuando tú te sientas sola, que aparezcan para guiarte cuando no sepas dónde ir y que te demuestren su amor cuando nadie más lo haga.
Imposible es llevarse bien con el mundo entero. Pero siempre habrán personas que estarán a nuestro lado, queriéndonos, aconsejándonos y apoyándonos en nuestras decisiones y actos. Y ese círculo será el completo, el que nos haga sentir llenos.